Después de una noche sin pescar nada, unos pescadores expertos, reciben la petición de echar las redes.
Creer en la palabra de un hombre que recién conocen o en su palabra de pescador
que sabe por experiencia que de día no se pesca y menos cuando la noche ha sido inútil.
Simón Pedro descubre que las palabras de Jesús son eficaces.
La misión es comunitaria. Solo entre todos podemos llenar este mundo de la palabra
liberadora de Dios.
Jesús nos llama desde nuestra realidad y condición.
La gente necesita palabras de esperanza que devuelvan el sentido de la vida.
Nos preguntamos: ¿ cómo respondemos a la llamada que nos hace Jesús ?
CADA DÍA ES UNA NUEVA OPORTUNIDAD PARA VIVIR AL MÁXIMO Y CENTRADOS EN LO QUE REALMENTE ES IMPORTANTE.
ResponderEliminarDAME SEÑOR TU MIRADA, PARA QUE CADA DÍA SEPA ESTAR ATENTA A LO QUE ME PIDAS
ResponderEliminarGRACIAS POR ESTAR AHÍ EN MI VIDA.